Entre helechos y magnolias

(Texto conjunto escrito entre Sandro y Rebecca)


(Sandro) Tras una mañana agotadora me dispongo a descansar, ya que debo abrir el vivero a las 17 horas, aunque aún hay tiempo. Son apenas las 14:30… Me mojo el pelo, lavo mis manos y mi cara, y en eso escucho un golpe en el portón del local. Pregunto “¿Quién es?”, y una figura sensual ingresa…

(Rebecca) Entro tímidamente al lugar, y descubro una tierna fragancia a rosas que me invade y me invita a recorrer sus largos pasillos. Allí te veo bien dispuesto, con escasa ropa debido al intenso calor que hace en el ambiente, mi corazón se acelera y trato de disimularlo, pero te digo: "Hola, estoy buscando unos helechos para adornar mi jardín", con voz balbuceante, sin dejar de mirar tus brazos musculosos que me atraen inevitablemente.

(Sandro) No comprendo por qué te dejé entrar, ya que soy cuidadoso de mis horarios, pero algo en tu presencia me impulsa a hacerte pasar a ver las plantas. Hace mucho calor, y aprovecho para regarlas mientras descubro cómo disfrutas olfateando mis flores. Nuestras miradas se cruzan y yo espero que me preguntes algo… pero nada, tú sigues recorriendo lentamente los pasillos.

(Rebecca) Estoy confundida en medio de aquel paraíso de aromas, que entremezclan las fragancias de las flores con nuestro propio sudor. Las plantas me acarician al pasar, y me dejo llevar por un vaivén de los sentidos que me hace estremecer. Te miro a los ojos sin decir palabra… asaltada por una sed repentina.

(Sandro) Te acercas y me pides tomar agua de la manguera. Te ofrezco un vaso, pero sonriendo me dices que no es necesario, que así está bien. En ese momento, mojas tu remera y resaltan tus pechos, que ya no sólo están brillosos por tu sudor… Trato de dirigir mi vista hacia otro lado, pero ya has visto despertar mi mirada lujuriosa y te digo: “¿Viste algún helecho que te interese?

(Rebecca) Ruborizada hasta el cabello, intento cubrir mis senos que se han erizado súbitamente, girando hacia otro sector. "Disculpa", te digo y me alejo, pero me sigues con amabilidad, intentando ayudarme a secarme. Tu contacto aviva mi corazón, y ya no puedo ocultar mi palpitar, al ver que tu cuerpo responde a mi estímulo.

(Sandro) Con un impulso, te conduzco al sector de las fresias y empiezo a acariciarte… espero tu desaprobación, pero veo que no estás enojada…

(Rebecca) No sólo no estoy enojada, sino que mi excitación crece al compás de tu respiración jadeante, que me enloquece y me alienta a darte mi consentimiento.

(Sandro) Dejo tus pechos al descubierto, provocando a mis flores que celen de tu belleza. Te los beso suavemente y bajo mi mano hacia tu sexo buscando aliviar tu deseo. Me miras… sonríes…

(Rebecca) Sin pensar, me dejo llevar por tus caricias. La humedad me invade y me invita a hacer locuras. Tú también sonríes, esperando que dé un paso más…

(Sandro) Te miro sugerente, diciéndote: “¿Puedo…?

(Rebecca) Sin responderte, vuelvo a besarte, a recorrer tu cuello con mi lengua ávida de sensaciones plenas y de un mundo de desvaríos...

(Sandro) Te beso hasta quedar sin aliento, sintiendo cómo tiemblas de manera rítmica, sin dejar de acariciar tu sexo. Tu mano me empuja hacia abajo y allí voy… comienzo a degustarte locamente.

(Rebecca) Siento que el delirio me acomete y tú sigues frenéticamente lamiendo el centro mismo de mi propio placer, hasta que enloquezco y te aparto. "Ohhh, ya no aguanto más!", le digo a tu pantalón a punto de romperse.

(Sandro) Tu mano toma mi sexo y siento estallar. No queremos más rodeos. Te digo: “Hagamos el amor”.

(Rebecca) Te empujo detrás de las ramas fragantes de magnolias. Elevo mi pierna derecha por sobre tu cintura y me embistes. Tu miembro penetra fácilmente y me dejas sin aliento, mientras degusto mi propio sabor, que ha quedado impregnado en tus labios.

(Sandro) Te poseo repetidamente, con una necesidad briosa capaz de ahuyentar todos los pudores. Con una mirada satisfecha, me observas cuando llego al orgasmo… Caminamos por todo el vivero para recuperar lentamente el aliento. Ya son casi las 16:30 y me doy cuenta de que no podré abrir así!

(Rebecca) Riendo tontamente como niños, pero satisfechos como animales que han logrado saciar sus apetitos, nos miramos divertidos. Yo te digo: "Encantada de conocerte, soy Rebecca".

(Sandro) Y yo, Sandro. Espero que te gusten mis helechos”. Nos acomodamos nuestras ropas y me dispongo a abrir el vivero, no sin antes volver a besarte locamente.

(Rebecca) "Volveré", te dije con un guiño. Y partí moviendo sensualmente mis caderas. Un tiempo después comprobé que había olvidado mis helechos, pero eso ya no me importaba. Ahora tenía una excusa para regresar...

(Sandro) Veo que en tu tarjeta me dejas tu número con un mensaje: “Despiértame mañana… quiero oír tu voz”.

17 comentarios:

A.L.Zarapico dijo...

Gracias por deleitarme con este relato, maravilloso...

Susy dijo...

I-M-P-R-E-S-I-O-N-A-N-T-E
Ahora mismo llamo a Jose y......

Catman dijo...

pues no tengo palabras, sencillament delicioso

kaisser dijo...

Exquisito relato mojado de erotismo... cuerpos que se funden de calor y yo sediento de placer.

Besos ardientes

EMBRUJADA dijo...

MuY buena fusiòn de vuestras letras,ha sido muy bonito leeros a los dos ...

Tenèis que repetir..

Aprovecho para desearte un felìz fin de semana..

Dulcemente tu amiga Embrujada.

Susana Peiró dijo...

Vaya, vaya, vayaaaa!

Dondequiera que vas, aparte de tu cartera, llevás la sensualidad Becca Querida!

Desde hoy, veré los helechos y las magnolias, con otros ojos!

Precioso, Muchas Gracias Chica Sexy!!!

Un besote Querida!

Yedra dijo...

Imagino que habrás disfrutado lo tuyo con este post! Eso es genial! jijiji
Un besote Rebequilla, tu si que sabes!
Yedra

ENCANTADORA DE DEMONIOS dijo...

Enhorabuena a los dos, me ha gustado mucho, bueno que digo...cual es la dirección del vivero? jajajajaja
Como siempre, me dejo llevar por tus palabras, por tus sensaciones y en este caso tambien por las de sandro.
Un besin niña linda, y otro para el.

Arkantis dijo...

Muy bueno!!! Enhorabuena a los dos
:-)

CalidaSirena dijo...

Precioso, un buen equipo hacéis..
Besos muy dulces a los dos

Anónimo dijo...

Que envidia
me encantan los relatos escritos a medias

....

Lolita y El Profesor dijo...

¿No pensaron en poner juntos un vivero? (Ji Ji Ji) :)
Besitos de Lolita
PD: (Gracias por el comentario) Muaaa

Anónimo dijo...

hermoso dialogo que destila deseos y pasion}
abrazos a ambos
besos
Blue

Mary dijo...

Hala, me ha encantado esa dialéctica de placer! Si es que los helechos ponen mucho....

Besines

Etèria dijo...

Precioso relato a 4 manos. Feliz despertar Rebecca y Sandro seguro que esos helechos le encantaron, jajaja.

Muy bonita vuestra colaboracion a ver si hay suerte y nos deleitais con más.

Lydia dijo...

Gracias por apagarnos la sed con ese relato... aunque ahora que lo pienso, tengo aun más sed...

DOMINA YOUR OBSSESION dijo...

REBECCA, ME ENCANTO ESTO DE ESCRIBIR EN PAREJA

BESOTES

VIRGINIA